jueves, 21 de enero de 2016

NEW AGE mal entendida

Foto Archivo Digital Alif Flower
 
          En un mundo donde las etiquetas son un salvoconducto a la tranquilidad propia o ajena, hacia la posibilidad de pertenencia a la tribu, podemos sumar a la vieja y no por ello menos actual interrogativa, de quién soy o mejor dicho quién no soy junto a la herencia biológica marcada por el ADN y modulada por la memoria psicológica de nuestra agua celular, que registra los comportamientos hasta cuatro generaciones en nuestro árbol genealógico, sumando todos aquellos mandatos asumidos en el tiempo de gestación junto a las emociones vividas por mama, y añadir los condicionantes sociales, la capacidad de impresión compartida del inconsciente colectivo, y a quien en ello crea, la sazón con la memoria de nuestras vidas pasadas, de tal manera que me puede resultar realmente difícil saber si me gusta el chocolate caliente o el mole, y si este saber elegir es propio o le pertenece a mi abuelo paterno alque le volvía loco el cacao, a pesar de que nunca lo conocí. Aunque amigos, en estos tiempos, para eso va una y se biodescodifica...

Ironías a parte y agradeciendo a nuestros ancianos todo el noble intento, o no tan noble, de crear a través de sus experiencias vitales un mundo para entregar el testigo que puede mejorar la marca de corredor, la pregunta base en esta enunciativa amplia que representa el mundo floral nos puede llevar a la pregunta: para qué, a qué suma, cómo suma, cuál es mi leccion vital. Qué debo hacer que honra mi expresión y contribuye a la unidad desde un lugar amoroso. Cómo puedo elevar mi vibración eliminando la queja, el enojo, la tristeza, el miedo, la angustia o el deseo que me conduce al sufrimiento. Cómo puedo aceptar la vida en el intento de andar camino en ese talante machadiano de golpe y verso. Y es que claro, me tengo que "quitar" esto.

 Llegados a este segundo nivel, también en los tiempos que corren, me hago una vipassana o me apunto a un seminario, eso sí certificado, por una prestigiosa escuela de mindfulness y de nuevo después de cada intervalo de vuelo espiritual comienzan las preguntas, esta vez ya hacia dentro: qué me atrapa de mi, que no me deja estar en paz, hasta que punto estoy dispuesto a salir de mi estructura de vida, porque me resisto a ser feliz, y para nuestros colegas, añadiriamos, qué esencia floral no he tomado nunca, por favor...guauuu, cómo no me di cuenta antes, si esto era lo que me faltaba.
Foto Archivo Alif Flower 

 Con inocencia torera iré al set de esencias y prepararé mi formula mágica en un nuevo intento de pastilla azul, a mi entender un fallo transpersonal en la impoluta película de matrix, formulas magicas en el afuera, eso sí, cada vez más sutiles, hasta que un día jugando a ser dioses o el oráculo de Delfos, resuelves como decía hace unos días un buen amigo en Sevilla, que no te puedes hacer de la new age o del athletic sin tener los conflictos biológicos resueltos.

A partir de aquí podemos proponer lo que queramos, destilar nuestra alquimia interior se vuelve un paso más sencillo: ser buena gente conmigo y con mis compañeros. Vaciar la pelota, no la vasca sino la de materia gris y pineal sin que hagan falta más fórmulas que el propio talante de honestidad interna, que pasa por esta que está aquí, un colega, encantada, para lo que haga falta.
Si contemplamos el reino vegetal y nos hacemos eco de su lenguaje, descubres que el roble es roble toda la vida y no necesita cambiar para crecer, para sentir, para buscar la humedad a través de sus raíces y para entregar el legado de su sabiduría al siguiente árbol en rango a través de la tierra. Que la margarita es blanca y amarilla en los colores que le faltan porque no le falta nada, y que la vida es un dejarse llevar aceptando ese medio camino entre lo dado y lo recibido.
Foto Archivo Lisa Claros para Alif Flower


Vivamos estas experiencias, por supuesto, pero caminando el bosque, escuchemos el susurro de sus hojas y frutos al caer. Seamos felices saltando al vacío de la paciencia, confiando y haciendo lo que nos toca, ni más ni menos. En todo caso más para los que esten por venir y que se torne un reír "tan callando!

ALICIA NEVADO
Creación y Dirección
ALIF FLOWER ESSENCE
www.alifflower.com